Tal vez te parezca ridículo al principio pensar que un incendio puede generar formaciones nubosas, pero no es un acontecimiento muy raro de ver, ¿quieres entender cómo es que esto sucede?
Formaciones nubosas pueden llegar a formarse como consecuencia de la convección producido por el intenso calor proveniente de, por ejemplo, incendios forestales o erupciones volcánicas. El aire al ser calentado tiene la tendencia a ascender, si esta masa de aire contiene suficiente humedad cuando alcance una altitud al cual la temperatura corresponda a su temperatura de saturación, es decir temperatura en el cual el aire no podrá soportar la humedad presente en el aire, este se condensará formando nubes.
El humo presente en el ambiente ayuda considerablemente a la formación de nubes, el humo es considerado un núcleo de saturación. Cuando el aire húmedo alcanza la temperatura de saturación, empieza el proceso de condensación, sin embargo, este proceso necesita de una superficie para que el proceso tenga lugar a la temperatura de saturación o temperatura del punto de rocío. Algunos ejemplos de tipos núcleos de saturación son: polvo, barro, partículas procedentes de combustiones diversas, sal marina de los rociones de las olas o cenizas volcánicas.
En ausencia de núcleos de condensación el proceso espontáneo de formación de gotas de agua puede no producirse llegándose a alcanzar sobresaturaciones de hasta el 400%. La presencia de núcleos de condensación en la atmósfera es por tanto muy importante en los procesos de formación de las nubes. En palabras mucho más simples, los núcleos de saturación actúan como una especie de esteroides para las formaciones nubosas.
Los géneros de nubes que se pueden originar gracias a este tipo de sucesos son del tipo cumulus y cumulunimbus, debido a la inestabilidad ocasionada por el incendio/erupción en la masa de aire.
En el caso de formarse cumulus, este sería un indicador de turbulencia moderada al nivel en el cual se encuentran las nubes, muy ocasionalmente estas nubes producen ligeras lluvias, son caracterizadas por tener una apariencia muy definida y bordes muy redondeados.
Si se da el caso en el que las nubes cumulus se desarrollen en cumulunimbus debido a la alta inestabilidad, esta nube produce lluvias intensas y tormentas eléctricas. La lluvia producida por una cumulunimbus es capaz de extinguir o al menos reducir el área incendio. Está caracterizada por su extenso desarrollo vertical y muy notorio oscurecimiento de su base.
NOTA: El nombre pyrocumulus, o por su traducción etimológica nube de fuego, no es el nombre oficial asignado a este tipo de nubes, sin embargo, es el más usado. La forma correcta de referirse a estas nubes “de fuego” es muy parecido a una formula gramatical: (Genero de la nube) + (Variedad de la nube) + Flammagenitus, que sería el nombre de la característica especial de esta nube. Ejemplos: Cumulus congestus flammagenitus, este sería una mención correcta de la nube, sin embargo, para simplificar el nombre (si no se tiene la necesidad de ser especifico) se puede omitir la variedad de la nube, ejemplo: Cumulus flammagenitus. Flammagenitus significa “engendrado u originado del fuego.”
Es importante para los pilotos reconocer este tipo de nubes y poder evitarlas, especialmente si se encuentran volando aeronaves de pequeñas dimensiones, pues la turbulencia producida al nivel de las nubes puede ser muy intensa, capaz de derribar a la aeronave. En caso de ser una nube producto de una erupción volcánica, las cenizas podrían dañar gravemente la planta motriz de la aeronave.
Comentários